Acompáñanos en un recorrido por los rincones secretos de Lisboa y conoce algunos de los enclaves más auténticos e impresionantes que alberga esta ciudad de Portugal.
Lisboa es una ciudad llena de encanto y personalidad propia, donde la mezcla de culturas ha creado un ambiente auténtico. Los visitantes pueden disfrutar de una impresionante mezcla de encanto histórico y arquitectura impresionante en cada rincón de la capital portuguesa.
Desdelas estrechas calles empedradas del barrio de Alfama hasta las impresionantes vistas
panorámicas del mirador de Santa Lucía, son muchos los lugares que no debes perderte
durante tu visita a esta fascinante ciudad.
Paseo por el centro de Lisboa
El centro de Lisboa es una enclave impresionante que cuenta con algunas de las atracciones turísticas más importantes. Alojándote en hoteles céntricos Lisboa, tendrás la oportunidad de explorar esta zona sin la necesidad de desplazarte durante tus días en la ciudad, lo que hará que tu experiencia sea mucho más cómoda y satisfactoria.
Uno de los puntos más destacados es la emblemática Plaza del Comercio, ubicada en las orillas del río Tajo y hogar de muchos monumentos históricos, como el majestuoso Arco de la Rua Augusta y la estatua del rey José I. Rodeada de exquisita arquitectura, esta zona es perfecta para un agradable paseo y disfrutar de la belleza y la historia que desprende la capital portuguesa.
El icónico Elevador de Santa Justa es una de las atracciones turísticas más populares de Lisboa. Construido en el siglo XIX, este altísimo ascensor transporta a los visitantes desde las calles más bajas del barrio de la Baixa hasta el de Chiado. Al subir a la parte superior del ascensor, los visitantes son recibidos con impresionantes vistas panorámicas de la ciudad, lo que hace que este viaje valga la pena.
Si buscas conocer más a fondo la vida local, lo ideal es que recorras las sinuosas calles de Alfama, Baixa y Chiado. Estos pintorescos barrios están llenos de edificios históricos, encantadores cafés y deliciosos restaurantes, lo que los convierte en un lugar maravilloso para pasar una tarde o una noche.
Panteón Nacional
Enclavado en el pintoresco barrio de Alfama, el Panteón Nacional es una visita obligada para los viajeros que se dirigen a Lisboa. Este gran edificio se construyó originalmente como iglesia en el siglo XVII y desde entonces se ha transformado en un panteón nacional, que alberga las tumbas de algunos de los ciudadanos más ilustres de Portugal. Cuando des un paseo por el Panteón Nacional, quedarás asombrado por la magnífica arquitectura y la grandeza del espacio.
Entrar en el Panteón Nacional es como retroceder en el tiempo. Adornado con impresionantes obras de arte, el interior del edificio rinde homenaje a la vibrante historia y cultura de Portugal.
Su ubicación es especialmente llamativa. Situado en el centro de Alfama, el edificio ofrece una vista espectacular de la ciudad y del río Tajo. Si lo visitas durante la puesta de sol, quedarás hipnotizado por los ardientes tonos rosa y naranja que llenan el cielo.
Mirador de Santa Lucía
Para disfrutar de una impresionante experiencia visual de la ciudad, es esencial hacer una
parada en el Mirador de Santa Lucía, donde los visitantes pueden contemplar el impresionante paisaje que adorna el balcón, con buganvillas y hojas de parra que se suman a la pintoresca atmósfera.
Desde este mirador, se pueden observar los tejados de terracota del antiguo barrio de Alfama y el majestuoso Castillo de San Jorge encaramado en lo alto de la colina. Por si fuera poco, aquí se puede disfrutar de una espectacular puesta de sol, cuando el sol dorado se sumerge en el horizonte y proyecta un cálido resplandor sobre el paisaje.
Castillo de San Jorge
Enclavado en el mismo centro de la ciudad se encuentra el emblemático Castillo de San Jorge. Levantado en el siglo XI, su estructura se ha transformado y modificado a lo largo de los siglos.
Ofrece unas vistas impresionantes de Lisboa y del río Tajo, y es un destino obligado para todos los viajeros. Una característica clave del castillo es la Torre de Ulises, llamada así por el legendario héroe griego, y brinda unas vistas impresionantes de la ciudad y el río. Los visitantes pueden subir las escaleras de caracol para explorar los distintos niveles de la torre, y una exposición en su interior ofrece información sobre la historia del castillo y sus ocupantes.
Monasterio de los Jerónimos
El Monasterio de los Jerónimos es un importante punto de referencia en Portugal, famoso por su impresionante arquitectura manuelina. Sus impresionantes tallas y decoraciones
ornamentales, que muestran la larga y próspera historia marítima del país, son un espectáculo para la vista. Los turistas pueden explorar los claustros, capillas y salas, para echar un vistazo al pasado y descubrir los secretos de este magnífico monasterio.
La principal atracción del Monasterio de los Jerónimos es su impresionante iglesia. Su altísimo techo abovedado está adornado con intrincadas tallas de piedra, y alberga las tumbas de famosos personajes portugueses como el explorador Vasco da Gama. También merece la pena visitar el claustro inferior, con impresionantes vistas de los jardines circundantes.